Incendios forestales, una catástrofe que se repite año tras año
Cada año arden millones de hectáreas en todo el planeta, pero cada vez nos encontramos con más incendios masivos en todo el mundo.
A medida que aumente el calor de la Tierra, aumentarán la frecuencia y la virulencia de estos fenómenos extremos. La fórmula es sencilla: a mayor calentamiento, más largos los veranos, más secos los bosques y, por lo tanto, más fácilmente arden.
Uno de los indicadores que muestran la relación entre cambio climático e incendios son los récords que se han batido en el número de incendios, así como en su alcance.
Las llamas también se hicieron extremas en territorios donde no imaginaríamos que se produjeran, como Siberia. Aunque allí el fuego no parece ser un fenómeno atípico, el año pasado los incendios tuvieron un alcance sin precedentes: se quemaron nada menos que 16 millones de hectáreas. Una superficie dos veces mayor que la de Austria.
En Estados Unidos ardieron varios centenares de casas, un hotel y un centro comercial, y miles de personas fueron evacuadas debido a los incendios forestales que el jueves (30/12/2021) por la noche avanzan en las afueras de Denver, capital del estado de Colorado.
Varios focos de incendio comenzaron el jueves y se propagaron rápidamente debido a los fuertes vientos. Se registraron rachas de hasta 169 kilómetros por hora en varios lugares, según el Servicio Meteorológico Nacional, lo que avivó las llamas y dificultó la labor de los bomberos.
Con el duro frío invernal, las llamas arrasaron fácilmente la región reseca por una sequía histórica. El origen del fuego se produjo cuando unas torres de electricidad se desplomaron por los potentes vientos y encendieron pequeños focos que tomaron forma en el deshidratado paisaje del condado de Boulder. Estos incendios que destruyeron «en un abrir y cerrar de ojos» barrios enteros del estado de Colorado, en el oeste de Estados Unidos, fueron extinguidos este viernes (31/12/2021) con la caída de nieve que apagó los últimos rescoldos.
En otros lugares, tras varias semanas de altas temperaturas, se declararon incendios en Australia Occidental, en la turística región de Margaret River. Varias regiones al sur de Sydney, que hace dos años sufrieron los peores incendios de la historia del país, registraron 21 centímetros de agua en las últimas 24 horas.
Los incendios forestales se han convertido en el principal peligro para los países del Cono Sur sudamericano en las últimas horas de 2021 y las primeras de 2022. El fuego ya ha afectado a más de diez provincias en Argentina y ha arrasado más de 20.000 hectáreas en la costa de Uruguay, una cifra récord para el país sudamericano.
En Argentina declararon la emergencia ígnea en todo el país mientras combatían los incendios en la Patagonia. Los incendios forestales traen consigo la inevitable pérdida de bosque nativo y biodiversidad, lo que representa una amenaza para la riqueza forestal, la flora y la fauna, perturbando la ecología y el medio ambiente en general.
